El equipo correntino se encuentra cumpliendo su peor campaña desde que milita en el torneo de la tercera categoría del fútbol argentino. El "aurirrojo" no gana desde hace seis partidos, con cinco derrotas y un solo empate, racha que coincide con la llegada del técnico Juan Alfonsín, que está en la cuerda floja luego de un nuevo traspié.
Con cuatro defensores, cinco volantes y un solo delantero, el equipo correntino salió a buscar el empate frente a un rival que, pese a ser local, tampoco fue generoso en la propuesta al plantear un esquema espejo. Así el partido resultó chato, aburrido, con escasas llegadas de riesgo. Sol de América, que tuvo la iniciativa, llegó con peligro recién pasada la media hora, cuando Mendoza recogió un rechazo corto con los puños de Quijano y ensayó un remate que se perdió apenas ancho.
El equipo correntino sólo cumplió en la labor defensiva, porque no creó nada positivo frente al arco de enfrente, a tal punto que Ferreyra fue un mero espectador. Cuando el primer tiempo parecía que terminaba inexorablemente sin goles, un centro de Villasanti generó una serie de rebotes en el área correntina y la pelota le terminó pegando en el brazo a Chamorro. Penal que el árbitro Liuzzi no dudó en cobrar y que Di Martino convirtió para que Sol se vaya con ventaja a los vestuarios.
En el inicio del complemento, Quijano salvó a Boca Unidos al taparle el remate que tenía destino de red a Di Martino, luego de una buena combinación en ataque de la que participaron Abecasis y Estrada. La visita no reaccionaba, y el local siguió arrimándose al arco correntino a través de un tiro libre de Mendoza que contuvo bien el "1" y un cabezaso de Marcos Ojeda que se perdió por arriba del horizontal.
Alfonsín buscó darle otra dinámica al equipo correntino de tres cuartos de cancha en adelante, con los ingresos de Ríos y Martínez Trejo por Piz y Martín Ojeda, que estaban amonestados, pero todo siguió igual. Luego hizo ingresar a Leani por Gómez, para adelantar a Livera, pero tampoco funcionó. Al que le resultó la variante fue al DT local Paredes, quien puso a Campero por Di Martino, y a los pocos minutos el delantero de refresco llegó hasta el fondo y envió un centro que Estrada, en posición dudosa, empujó a la red para aumentar la diferencia en favor del equipo formoseño.
A Boca Unidos se lo vio caido, derrotado, sin carácter. Un remate de media distancia de Sánchez Paredes que pasó cerca, sacudió la modorra, y enseguida, el ingresado Villán encontró una pelota en el área para fusilar de sobrepique a Ferreyra para poner el descuento cerca del final Recién ahí reaccionó el equipo correntino que fue con todo en busca de la igualdad, aunque careció de precisión y profundidad, hasta que llegó el pitazo final que marcó una nueva derrota, la cuarta consecutiva, que seguramente terminará con la salida de Alfonsín de la dirección técnica, ya que ni el juego ni los números lo avalan.
Crónica: Diario El Litoral
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