El sueño olímpico sigue vigente, aunque la espera se prolongó hasta 2021. El desafío que se planteó hace varios años Alejandro Vera también se vio afectado por el aislamiento social preventivo y obligatorio que rige en la Argentina y la suspensión de los clasificatorios con vistas a los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020.
Casi todo el deporte mundial sufrió una pausa por la pandemia provocada por el covid-19, el remo argentino estableció su paralización desde el pasado 13 de marzo. “Estaba en el Tigre, provincia de Buenos Aires, en la última concentración previa al Preolímpico Regional y al torneo Sudamericano a disputarse durante abril en Río de Janeiro”, relató Vera.
“Cuando se desató este problema el entrenador decidió que vuelva a Corrientes, por suerte regresé en el momento justo porque a los tres días ya no habían micros de larga distancia”, comentó el deportista del Club de Regatas Corrientes. Vera se encontraba junto con la Selección Argentina de remo adaptado buscando junto al entrenador principal Esteban Briguglio la puesta a punto para el Preolímpico que debía comenzar el 2 de abril en la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
“Era un momento de mucha expectativa, ansiedad y con muchas horas de entrenamientos. Me jugaba una plaza para los Juegos Paralímpicos Tokio 2020 y también para el Sudamericano. Estaba en un momento muy bueno y bajando mis tiempos”, sostuvo el deportista que comenzó en la actividad hace cuatro años.
Al actual bicampeón argentino en la categoría PR1 y ganador de la última Copa América que se corrió en Nordelta (Buenos Aires) durante el 2019 relató cómo vive la cuarentena en Corrientes. “La estoy llevando de una manera inaguantable, pero no queda otra. Trato de mantenerme. Hago ejercicios con bandas elásticas, pesas y ham-bike fija de dos a tres veces al día. Pero no es lo mío, lo mío es el agua, los días pasan y sentís que tu estado físico ya no es el mismo”.
La medida de aislamiento que tomó el Gobierno nacional impide la práctica del deporte al aire libre. Vera tiene una visión particular sobre el remo. “Sé que las personas me van a salir con los tapones de punta, pero hay deportes que son netamente individuales como es el mío que lo desarrollo en el agua y al aire libre. Si es por mí, que me permitan remar, necesito estar con mi bote, necesito remar, lógicamente con todos los cuidados preventivos que sean necesarios”.
Por último, señaló: “Lo que se viene ahora son las nuevas fechas de las competencias, la que ya se sabe es la de Tokio 2020 que será en agosto del 2021”. A Vera solamente le resta esperar para conocer cuándo será el preolímpico y así determinar una nueva planificación que demandará nuevamente horas de entrenamientos, viajes y mucho sacrificio para convertirse en un deportista olímpico.
Nota: Diario El Litoral
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