El encuentro disputado en la cancha de Chaco For Ever fue interrumpido cuando se jugaban 28 minutos de la primera parte debido a una agresión generada por simpatizantes chaqueños hacia los correntinos. El Consejo Federal deberá decidir si se completa y cuándo.
Cuando se esperaba que las “rispideces” se observaran dentro del rectángulo de juego, por lo que estaba en disputa entre Defensores de Puerto Vilelas y Cambá Cuá en la última fecha clasificatoria del torneo Federal Regional Amateur, el “espectáculo” -lamentable- tuvo lugar fuera del verde césped. Porque en una de las tribunas del coqueto estadio de Chaco For Ever, un cruce entre barras del club chaqueño y simpatizantes/allegados del equipo correntino, desembocó en la (tardía) intervención de la Policía, que para disuadir los incidentes arrojó gases.
Esto provocó que se descompensaran algunos jugadores de Cambá Cuá, aunque el más “afectado por la toxicidad de los gases” parecía ser Jorge Almirón, según explicó a época el médico designado para la cobertura del evento deportivo, Dr. Mariano Jerez. Fue el propio Jerez quien le indicó al árbitro Ramón Guzmán que Almirón no estaba en condiciones de continuar el partido, por lo que el joven juez oriundo de Sáenz Peña -secundado por sus coterráneos Cristian Gómez y Horacio Gómez- decidió suspender el encuentro correspondiente a la 10ª fecha de la región Litoral Norte. Si bien desde que frenó las acciones, hasta que tomó la decisión Guzmán había pasado más de media hora, el informe arbitral determinó que el juego se detuvo a los 28 minutos del primer tiempo, cuando empataban sin goles.
Esto genera incertidumbre de cara a los “playoffs” porque de haber un ganador, independientemente sea Defensores o Cambá Cuá, clasificará como uno de los mejores 3º que forma parte del lote de 16 clubes que seguirán en carrera por la Región Litoral Norte. El comisario Alberto Godoy, a cargo del operativo, dijo al árbitro que garantizaba la seguridad del espectáculo. Sin embargo, llamó la atención como con tan poco público presente no se haya podido prevenir los incidentes.
De todos modos, Guzmán dejó firme su decisión y ahora todo pasará a manos del Tribunal de Disciplina, que deberá evaluar los informes (arbitral y policial) para determinar si continuará la historia en la cancha o hay sentencia fuera de ella. Mientras se suscitaban los incidentes, había jugadores de Cambá Cuá con mucha sensación de impotencia, bronca, porque eran testigos de la golpiza a la que eran sometidos algunos de sus familiares. Incluso, a los hinchas de Defensores de Vilelas, que por fortuna no avanzaron en gran número, poco les importó que haya mujeres en ese grupo que fue agredido.
Uno de los más damnificados por los golpes recibidos sería el hermano de Javier Sosa, actual delantero de Cambá Cuá pero con pasado en For Ever. No obstante, hubo varios familiares de otros jugadores que también padecieron los efectos de los gases lacrimógenos arrojados por la Policía para disuadir a los violentos.
Luego de algunos minutos de máxima tensión, de a poco fueron retomando las pulsaciones normales pero fue cuando Jerez informó a Guzmán que Almirón no estaba en condiciones; se suspendió. Mientras rodó la pelota, el que hizo mejor las cosas fue Cambá Cuá, pero careció de contundencia, algo que adoleció a lo largo del certamen. No obstante, ahora dirá el Tribunal si se completa el partido o si se le otorgan los tres puntos al equipo correntino.
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Cuando se esperaba que las “rispideces” se observaran dentro del rectángulo de juego, por lo que estaba en disputa entre Defensores de Puerto Vilelas y Cambá Cuá en la última fecha clasificatoria del torneo Federal Regional Amateur, el “espectáculo” -lamentable- tuvo lugar fuera del verde césped. Porque en una de las tribunas del coqueto estadio de Chaco For Ever, un cruce entre barras del club chaqueño y simpatizantes/allegados del equipo correntino, desembocó en la (tardía) intervención de la Policía, que para disuadir los incidentes arrojó gases.
Esto provocó que se descompensaran algunos jugadores de Cambá Cuá, aunque el más “afectado por la toxicidad de los gases” parecía ser Jorge Almirón, según explicó a época el médico designado para la cobertura del evento deportivo, Dr. Mariano Jerez. Fue el propio Jerez quien le indicó al árbitro Ramón Guzmán que Almirón no estaba en condiciones de continuar el partido, por lo que el joven juez oriundo de Sáenz Peña -secundado por sus coterráneos Cristian Gómez y Horacio Gómez- decidió suspender el encuentro correspondiente a la 10ª fecha de la región Litoral Norte. Si bien desde que frenó las acciones, hasta que tomó la decisión Guzmán había pasado más de media hora, el informe arbitral determinó que el juego se detuvo a los 28 minutos del primer tiempo, cuando empataban sin goles.
Esto genera incertidumbre de cara a los “playoffs” porque de haber un ganador, independientemente sea Defensores o Cambá Cuá, clasificará como uno de los mejores 3º que forma parte del lote de 16 clubes que seguirán en carrera por la Región Litoral Norte. El comisario Alberto Godoy, a cargo del operativo, dijo al árbitro que garantizaba la seguridad del espectáculo. Sin embargo, llamó la atención como con tan poco público presente no se haya podido prevenir los incidentes.
De todos modos, Guzmán dejó firme su decisión y ahora todo pasará a manos del Tribunal de Disciplina, que deberá evaluar los informes (arbitral y policial) para determinar si continuará la historia en la cancha o hay sentencia fuera de ella. Mientras se suscitaban los incidentes, había jugadores de Cambá Cuá con mucha sensación de impotencia, bronca, porque eran testigos de la golpiza a la que eran sometidos algunos de sus familiares. Incluso, a los hinchas de Defensores de Vilelas, que por fortuna no avanzaron en gran número, poco les importó que haya mujeres en ese grupo que fue agredido.
Uno de los más damnificados por los golpes recibidos sería el hermano de Javier Sosa, actual delantero de Cambá Cuá pero con pasado en For Ever. No obstante, hubo varios familiares de otros jugadores que también padecieron los efectos de los gases lacrimógenos arrojados por la Policía para disuadir a los violentos.
Luego de algunos minutos de máxima tensión, de a poco fueron retomando las pulsaciones normales pero fue cuando Jerez informó a Guzmán que Almirón no estaba en condiciones; se suspendió. Mientras rodó la pelota, el que hizo mejor las cosas fue Cambá Cuá, pero careció de contundencia, algo que adoleció a lo largo del certamen. No obstante, ahora dirá el Tribunal si se completa el partido o si se le otorgan los tres puntos al equipo correntino.
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