El atacante brasileño Erivaldo De Sousa fue la figura en el triunfo 2-0 de Ferroviario a expensas de Cambá Cuá, para quedar bien perfilado en la Zona 3.
El brasileño Erivaldo De Sousa fue uno de los jugadores que gravitaron en Ferroviario para doblegar el domingo a Cambá Cuá (2-0) y encarrilarse apuntando a los primeros puestos de la Zona 3 -Litoral Norte del torneo Federal Regional Amateur-.
Fue nota obligada al finalizar el partido, y se prestó con humildad al requerimiento de época. “Era un partido clave. Ellos estaban ahí arriba (Cambá Cuá llegaba invicto a la cita) y debíamos sacar un buen resultado. Estábamos bien concentrados para hacer un gran partido y gracias a Dios se nos dio el triunfo”, dijo.
Sin dudas, De Sousa fue el delantero más importante ante Cambá Cuá; cuando se le mencionó eso, explicó: “Tenía que poner mucha movilidad, tirar las diagonales, además de desbordar, ir de un lado al otro, buscando desordenar un poco la defensa de ellos”. También tuvo un momento para referirse a los goles originados con pelota detenida al indicar: “Venimos trabajando toda la semana jugadas de ese tipo, gracias a Dios salió bien y ahora a descansar para el próximo partido”.
El domingo, sortearon un duro escollo, el brasileño sostuvo que Cambá Cuá “es un equipo difícil, está bien ordenado, hace mucho que no perdían. Ganaron un Provincial, sabíamos que sería complicado enfrentarlos, pero estábamos mentalizados para hacer un buen partido, y así fue”.
Da la impresión de que por plantel, Ferroviario está en condiciones de dar más. De Sousa comparte esa opinión: “Con la calidad de jugadores que tenemos, sabemos que podemos dar un poquito más, pero también hay un rival enfrente. Por ahí no jugamos tan bien, pero ganamos, y eso es lo más importante, porque en un torneo corto, si vos no ganás, se complica. Hoy ganamos, y estamos felices”.
En el segundo tiempo, dio con todo el cuerpo sobre el muro perimetral y se temió que pudiera ser un golpe serio, sin embargo, el jugador expresó: “Gracias a Dios, a pesar del golpe duro, quedé un poquito dolorido pero estoy bien”. Antes de la despedida, se le consultó si Ferro ya se encarriló en el torneo, De Sousa fue cauto al responder: “Vamos paso a paso, ponemos los pies sobre la tierra, hay que seguir partido tras partido y lograr el objetivo”.
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El brasileño Erivaldo De Sousa fue uno de los jugadores que gravitaron en Ferroviario para doblegar el domingo a Cambá Cuá (2-0) y encarrilarse apuntando a los primeros puestos de la Zona 3 -Litoral Norte del torneo Federal Regional Amateur-.
Fue nota obligada al finalizar el partido, y se prestó con humildad al requerimiento de época. “Era un partido clave. Ellos estaban ahí arriba (Cambá Cuá llegaba invicto a la cita) y debíamos sacar un buen resultado. Estábamos bien concentrados para hacer un gran partido y gracias a Dios se nos dio el triunfo”, dijo.
Sin dudas, De Sousa fue el delantero más importante ante Cambá Cuá; cuando se le mencionó eso, explicó: “Tenía que poner mucha movilidad, tirar las diagonales, además de desbordar, ir de un lado al otro, buscando desordenar un poco la defensa de ellos”. También tuvo un momento para referirse a los goles originados con pelota detenida al indicar: “Venimos trabajando toda la semana jugadas de ese tipo, gracias a Dios salió bien y ahora a descansar para el próximo partido”.
El domingo, sortearon un duro escollo, el brasileño sostuvo que Cambá Cuá “es un equipo difícil, está bien ordenado, hace mucho que no perdían. Ganaron un Provincial, sabíamos que sería complicado enfrentarlos, pero estábamos mentalizados para hacer un buen partido, y así fue”.
Da la impresión de que por plantel, Ferroviario está en condiciones de dar más. De Sousa comparte esa opinión: “Con la calidad de jugadores que tenemos, sabemos que podemos dar un poquito más, pero también hay un rival enfrente. Por ahí no jugamos tan bien, pero ganamos, y eso es lo más importante, porque en un torneo corto, si vos no ganás, se complica. Hoy ganamos, y estamos felices”.
En el segundo tiempo, dio con todo el cuerpo sobre el muro perimetral y se temió que pudiera ser un golpe serio, sin embargo, el jugador expresó: “Gracias a Dios, a pesar del golpe duro, quedé un poquito dolorido pero estoy bien”. Antes de la despedida, se le consultó si Ferro ya se encarriló en el torneo, De Sousa fue cauto al responder: “Vamos paso a paso, ponemos los pies sobre la tierra, hay que seguir partido tras partido y lograr el objetivo”.
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